Cada vez son las más opciones de llevar a cabo tratamientos de salud en casa, ahorrando en tiempo y costes. El masaje linfático no es una excepción.
Los masajes linfáticos caseros tienen la función de ayudar a que nuestro cuerpo elimine toxinas estimulando el sistema linfático. Este masaje es muy tenue y se recomienda para a través de él mejorar el flujo de toxinas y poder eliminarlas más fácilmente de nuestro cuerpo.
Su aplicación se puede llevar a cabo en todo el cuerpo o bien en una zona concreta del mismo. Cuando es realizado en todo el cuerpo, tiene el beneficio de ayudar a ir con mayor frecuencia al baño y a tener un sueño más relajante durante la noche. Si se aplica para una parte específica, el masaje linfático ayuda a mejorar las dolencias de esa zona.
Esta vez nos centraremos en el masaje linfático casero específico para la celulitis. Para ello tendrás que concentrarte en la zona afectada para lograr que la grasa acumulada en la superficie se distribuya parejamente, logrando que la piel quede lisa.
El masaje anti- celulítico es más profundo y concentrado en una zona específica, lo que contrasta de un masaje generalizado. Se trata de un masaje suave sobre la zona, pero empleando algo más de fuerza en los dedos para lograr deshacer los nódulos de las áreas con celulitis y para ayudarse se puede utilizar algún aceite de aromaterapia, acentuando los beneficios del masaje.
La aplicación de esta técnica no es incompatible con otras prácticas para la mejora de nuestra salud. De hecho, es importante que el masaje linfático sea combinado con una alimentación sana, siendo recomendable tomar al menos 2 litros diarios de agua y hacer ejercicios para poder eliminar por completo la grasa y toxinas del cuerpo. Ten en cuenta que dependiendo de las necesidades una sesión puede tener una duración de 50 minutos a 1 hora y media.